Hola, me llamo Paz!

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Poco a poco va aumentado nuestra colección de sellos usados!

EL ENIGMA DEL ASCENSOR

Un señor vive en el 7º piso de una finca.Al volver de su trabajo  coge el ascensor y sube, ¡ pero se baja en el 5º piso y sube andando hasta el 7º! Y así siempre menos los días de lluvia o cuando en el ascensor va con él alguna persona con algún vecino; en ese caso ¡sí sube hasta su casa en ascensor!
                                             ¿PORQUÉ?


(Haz clic en comentarios y deja tu respuesta)

¿QUERÉIS CONOCER A UNOS ANIMALES MARINOS MUY EXTRAÑOS?

Los medios de comunicación y sus inventores

TRABAJANDO EN LA CLASE DE TERCERO!

Hoy Maya me ha contado esta adivinanza,¡a ver quién la adivina!

¡Trabajamos la poesía!

QUIERO UN CABALLO DE.......

CON ALAS DE.....

QUE NO.......

Y QUE ME DEJE....

¡Aprende las tablas de multiplicar del 1 al 9 cantando!

La tabla del 1

 


La tabla del 2

 


La tabla del 3 

 


La tabla del 4

 


La tabla del 5

 


La tabla del 6

 


La tabla del 7

 


La tabla del 8

 


La tabla del 9

 

¡ ADIVINA, ADIVINANZA !

Un pato y un perro ¡amigos!

¡Ya casi están aquí los Reyes Magos!

EL CAMELLO COJITO
(AUTO DE LOS REYES MAGOS)
GLORIA FUERTES

El camello se pinchó
Con un cardo en el camino
Y el mecánico Melchor
Le dio vino.

Baltasar fue a repostar
Más allá del quinto pino....
E intranquilo el gran Melchor
Consultaba su "Longinos".

-¡No llegamos,
no llegamos
y el Santo Parto ha venido!

-son las doce y tres minutos
y tres reyes se han perdido-.

El camello cojeando
Más medio muerto que vivo
Va espeluchando su felpa
Entre los troncos de olivos.

Acercándose a Gaspar,
Melchor le dijo al oído:
-Vaya birria de camello
que en Oriente te han vendido.

A la entrada de Belén
Al camello le dio hipo.
¡Ay, qué tristeza tan grande
con su belfo y en su hipo!

Se iba cayendo la mirra
A lo largo del camino,
Baltasar lleva los cofres,
Melchor empujaba al bicho.

Y a las tantas ya del alba
-ya cantaban pajarillos-
los tres reyes se quedaron
boquiabiertos e indecisos,
oyendo hablar como a un Hombre
a un Niño recién nacido.

-No quiero oro ni incienso
ni esos tesoros tan fríos,
quiero al camello, le quiero.
Le quiero, repitió el Niño.

A pie vuelven los tres reyes
Cabizbajos y afligidos.
Mientras el camello echado
Le hace cosquillas al Niño.