Dame un momento de tu tiempo.
-Papá, papá, ¿cuanto ganas por hora?,
-no me molestes que estoy ocupado, responde el papá con dureza.
-Papa por favor solo dime, ¿cuanto ganas por hora?
-Quince euros, responde el papá con menos severidad.
-Papá, ¿me podrías diez euros?.
-Vete a dormir y no me canses, dice el papá enfadado.
Cae la noche, el papá medita, y se siente culpable, va al cuarto del pequeño y le dice en voz baja:
-Aquí tienes el dinero que me pediste.
El niño da las gracias mete su manita bajo la almohada y saca unas monedas y le dice a su papá:
- Ahora ya completé el dinero, tengo quince euros, papá..
-Vete a dormir y no me canses, dice el papá enfadado.
Cae la noche, el papá medita, y se siente culpable, va al cuarto del pequeño y le dice en voz baja:
-Aquí tienes el dinero que me pediste.
El niño da las gracias mete su manita bajo la almohada y saca unas monedas y le dice a su papá:
- Ahora ya completé el dinero, tengo quince euros, papá..
¿Me podrías vender una hora de tu tiempo?
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